Un paseo por el barrio judío de Palma de Mallorca

En la ciudad medieval de Palma de Mallorca existía la clásica organización de la época. Como toda ciudad del momento, Palma tenía una judería, conocido como el bario judío de Palma de Mallorca. Estas juderías se encontraban amuralladas y la entrada a las mismas se podía hacer sólo a través de algunas puertas que custodiaban su interior. Hoy en día, en Palma existen elementos que recuerdan el pasado judío de Palma. ¿Te apetece conocer estos elementos y otros que han desaparecido para conocer el barrio judío de Palma de Mallorca?

Los judíos en la Palma medieval

Las juderías durante la edad media estaban protegidas por el rey, ya que los judíos, considerados de su propiedad, eran quienes le dotaban de servicios que no encontraba en otros barrios.

Los judíos eran ciudadanos que no pagaban impuestos, aunque a cambio debían dotar de servicios al rey, como proporcionarle vino griego, arreglar su ropa, prestarle dinero etc. Los judíos sabían leer y escribir al menos en dos idiomas, en hebreo, ya que leían el torà varias veces al día, y en el idioma local, en este caso el mallorquín.

Muchos los cristianos no sabían leer, por lo que estéticamente un barrio judío y uno cristiano ya se podía diferenciar al haber en el primero letreros y carteles, mientras en el segundo no existían, ya que nadie sabía leerlos.

En el siglo XV, en concordancia con los enfrentamiento entre musulmanes, cristianos y judíos en el resto de Europa, los cristianos invadieron la judería. Los judíos fueron expulsados de la ciudad u obligados a renunciar a su religión. La judería de Palma, conocida como Call maior fue quemada y prácticamente no quedó nada de lo que un día fue una ciudad casi independiente.

La judería de Palma de Mallorca

El barrio judío propiamente dicho fue trasladado en tres ocasiones. El primer emplazamiento de los tres comenzaría en la actual plaza de Santa Eulalia. Cada judería tenía una calle mayor que hacía de arteria principal del barrio. Por ella debían pasar al menos dos carros de caballos. En el siglo XII esta calle era la actual calle Santa Eulalia.

Calle Sol, la entrada a la judería de Palma

A pesar de sus los dos primeros emplazamientos de la judería de Palma de Mallorca, el principal y el que duró más años fue el que comienza en la Calle Sol. Su nombre actual no es casual, ya que deriva de la palabra dinero en mallorquín. En este lugar, en el suelo del comienzo de la calle, podemos ver una placa que conmemora la antigua entrada a Call. La calle que lleva a esta puerta se llama, no casualmente, calle del Call.

El que existiera una puerta de entrada implica que el Call estaba amurallado, y los judíos hacían toda su vida dentro. Aquí había tiendas, escuelas, médicos y todos los servicios que necesitaban en su día a día.

Elementos originales de la época medieval

La puerta de entrada del Call es un buen punto para poder identificar las partes de los edificios que son originales de la época. En el primer edificio de la calle Sol, su esquina muestra una fila de grandes bloques de piedra blanca de sillería bajo el letrero con el nombre de la calle. Esta piedra blanca es original, y entra en contraste con la piedra rojiza o cemento del resto del edificio.

Esta piedra original del Call o barrio judío de Palma de Mallorca es piedra blanca de Santanyi, mientras que la construcción posterior es piedra marès,o arenisca, de color marrón.

Calle de Can Dusai

Un elemento que no pasa desapercibido es el gran arco que comunica la calle Motission con la calle Can Dusai. Esto indica que eran dos calles principales calles del call. Por aquí pasaban carruajes que fueron desgastando, con el paso de los años, las esquinas de la calle. Hoy en día el arco atraviesa un palacete que antes de ser adjudicado a una familia nombre cristiana, era varias casas del barrio judío.

Antigua sinagoga mayor de la judería de Palma de Mallorca

La actual iglesia de Montesión se emplaza sobre la original sinagoga mayor.

Lo que queda de ella es parte de la base, que se extiende desde la portada, por la fachada derecha hasta la parte trasera. Esta parte es de material diferente, como el edificio que vimos la entrada.

Entre los mallorquines existe la «tradición» de escribir sus deseos en un papel y meterlos entre las piedras de la base de la sinagoga (original) esperando que sean cumplidos. La comunidad judía en Palma le tiene mucho cariño.

Los gremios de la judería

En su mejor época, cada calle la ocupaba un gremio, siendo testigo de ello el nombre de algunas de las calles. Así encontramos la calle de los caldereros, la calle de la peletería, la calle de la crianza o la calle de los botoneros.

Los botoneros tenían una labor muy apreciada por el rey, ya que los botones, elaborados con piedras exóticas y muy valiosas, indicaban el nivel de riqueza de quien los mostraba.

Como seguramente sabréis, la usura no estaba prohibida en el Torá, el texto judío, por lo que los banqueros judíos de Palma eran quienes prestaban dinero a muchos de los comerciantes de la zona. Esto incluía clientes cristianos y gente de paso, que debían entrar en el Call para estos servicios.

Elementos medievales

Otro edificio que merece la pena admirar mientras paseamos por la herencia judía de Palma de Mallorca está en la calle de los botoneros. Es el primer edificio que encontramos al entrar en la calle de los botoneros desde la plaza de San Gerónimo, y tiene un cartel que indica su pasado medieval. Algunos elementos originales que mantiene son sus ventanas (excepto las de arco de medio punto, que son posteriores).

La judería de Palma de Mallorca fuera de las murallas

La caja de ahorros que encontramos, hoy en estado de restauración, también es de época judía. Aquí trabajaban banqueros y prestamistas de la época y se podía acceder a ella tanto desde la parte interior de la muralla como por la exterior.

Además la carne de las tiendas judías era apreciada por muchos de los habitantes de la Palma medieval, incluidos los cristianos. De hecho, la carnicería kosher se encontraba a las puertas de la muralla pero fuera. Así todos podían comprar en ella, no sólo los habitante del barrio judío de Palma. El negocio era muy popular entre los cristianos y en muchas ocasiones la iglesia intentó trasladarla, aunque debido a la protección que gozaban del rey fue difícil.

Control de los cristianos sobre el barrio judío de Palma

Muy cerca de cada puerta de la judería de Palma de Mallorca se situaba una iglesia cristiana, a modo de custodia del orden de la ciudad. Así la actual iglesia de Sant Françesc, que por aquella época no era franciscana, creó un colegio para hacer sombra a las escuelas judías, que educaban a grandes pensadores. La iglesia y escuela están frente a donde se encontraba la antigua muralla de la judería.

Los judíos desde la edad Media hasta la actualidad

Después del expolio del barrio judío de Palma de Mallorca, los habitantes del call que se quedaron en la ciudad de Palma vivían en dos o tres calles de la zona, como la calle Platería o San Bartolomé. Aquí han vivido sus descendientes, los conocidos en Mallorca como chuetas, hasta hace algunos siglos.

Durante aquella época, existía un trato discriminatorio hacia los judíos, viéndose agravado en la época de la Inquisición. No obstante, la contribución de la comunidad judía a la ciudad de Palma fue enorme, por lo que poco a poco se va disolviendo. Aunque está mal visto, algunas personas mayores todavía tienen una visión negativa de los chuetas.

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Esperamos que os haya gustado conocer el barrio judío de Palma de Mallorca. Un lugar excelente para conocer el pasado de nuestra ciudad y conocer los elementos que la han ido haciendo crecer hasta ser lo que es hoy en día. Sólo os queda disfrutar de la judería de Palma de Mallorca con vuestros propios sentidos cuando visitéis la ciudad. ¡A volar!